jueves, 29 de noviembre de 2012

"QUIERO SER COMO ARGUEDAS, UN ESCRITOR BUENO Y MACHO"


Wilberth Laucata obtuvo el primer lugar en el concurso nacional de narrativa oral y ensayo, categoría lengua originaria, organizado por el Gobierno Regional de Arequipa. De solo diez años dice extrañar su pueblo, Hampatina, en la provincia de Canas, Cusco. "En la casa hablamos en quechua para no olvidar nuestras costumbres", cuenta.

Wilberth quiere ser como José María Arguedas. "Él era un hombre bueno y macho. Yo quiero ser un escritor macho", dice. Ya leyó Los ríos profundos. "Se ha identificado mucho con el niño de la obra", agrega su tutor Jesús Uscamayta, también de raíces cusqueñas.

Se refiere a Ernesto, el héroe arguediano que se traslada de Cusco a Abancay, donde lo matriculan en un colegio y observa la explotación de los indios por los hacendados en los campos de cultivo. Cincuenta años después, hay cosas que no han cambiado mucho.

Arguedas escribía también poesía. Y en quechua. Maytan rinki ñausa urpi / maytan rinki, tutañatak / chiri chakichaykita k´asoypi taniykachiy / sonk´oypiñatak´saykusk´a raprachaykita (¿Adónde vas, paloma ciega / adónde vas si ya es de noche? / Pon tus fríos pies en mi pecho / tus alas descansan sobre el latido de mi corazón).

Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el 8.46% de niños en edad escolar tiene como lengua materna el quechua y el 0.56% el aimara. Pedro Flores sostiene que ellos viven principalmente en las zonas más alejadas de las provincias de La Unión, Caylloma, Condesuyos y Castilla. Según la Encuesta Nacional de Hogares 2007 del Inei, en Arequipa hay 23 mil 333 niños quechuas en edad escolar y mil 544 aimaras.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Share

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More