Colombia
y Nicaragua anunciaron que buscarán apoyo en organismos como la ONU para
expresar su posición frente al fallo de la Corte Internacional de Justicia
(CIJ), que el pasado lunes le cedió gran parte de territorio marítimo del
Caribe colombiano al país centroamericano.
La
ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, María Ángela Holguín, aseguró
que el gobierno de su país* no se resignará ante el fallo del tribunal de La
Haya* y anunció que se buscarán nuevas formas legales que “contrarresten” las
consecuencias.
“No
nos vamos a resignar”, indicó Holguín, quien además consideró el retiro de su
país del Pacto de Bogotá firmado en 1948 para aceptar la jurisdicción de la
CIJ.
La
funcionaria precisó que tras sostener conversaciones con sus colegas de Costa
Rica, Enrique Castillo, y el vicecanciller panameño, Francisco Álvarez, así
como sus embajadores en Estados Unidos y Jamaica, planteará “una reclamación
conjunta” por la afectación que provocó el fallo de la CIJ en los límites de
estas naciones.
Holguín
manifestó también que entes internacionales, como la Organización de Naciones
Unidas (ONU) y la Organización de Estados Americanos (OEA), están siendo
notificados por el gobierno colombiano por los aparentes vacíos jurídicos que
considera están en el fallo.
NICARAGUA
TAMBIÉN RESPONDE
De
su parte, la presidenta de la Corte Suprema de Justicia de Nicaragua, magistrada
Alba Luz Ramos, lamentó que el gobierno del presidente Juan Manuel Santos
rechazara la sentencia judicial que adjudica a Nicaragua al menos 200 millas
náuticas donde Bogotá ejercía soberanía.
“Colombia
concurrió a la Corte, participó del procedimiento, contestó las memorias, por
lo tanto no puede ahora decir que no lo reconoce”, señaló Ramos, quien
consideró la posibilidad de pedirle al Consejo de Seguridad de la ONU “que tome
medidas para que Colombia cumpla” la sentencia.
La
funcionaria recordó que Nicaragua no posee fragatas de guerra y dijo esperar
que el caso se resuelva conforme al derecho internacional, porque “es en la CIJ
donde se dirime este tipo de conflictos y todos estamos obligados a aceptar sus
resoluciones”.
CRONOLOGÍA
Nicaragua
demandó a Colombia en 2001 ante la CIJ tras desconocer el tratado bilateral
Esguerra-Bárcenas (1928), en el cual Managua aceptó la soberanía de Bogotá
sobre el archipiélago que es ejercida en esas islas del Caribe desde 1803,
cuando la corona española las dejó en manos de la Real Audiencia de Santafé de
Bogotá.
La
CIJ ratificó en 2007 la soberanía colombiana sobre el archipiélago de San
Andrés, Providencia y Santa Catalina, pero se declaró competente para definir
los límites entre ambos países, al considerar que el meridiano 82 no debería
ser la frontera marítima.
Pese
a que el tribunal ratificó el lunes la soberanía colombiana sobre esas
posesiones,* movió el límite hacia el oriente y entregó a Nicaragua la porción
marítima.* Dos de los cayos quedaron en un sector nicaragüense, lo que ha
causado una gran controversia en Colombia.
Por
el momento, la Armada de Colombia recibió la orden de Santos de “mantener la
soberanía” en la zona adjudicada a Nicaragua, hasta que se defina el camino a
seguir tras la sentencia del tribunal, según reportó hoy el comandante de esa
fuerza, almirante Roberto García.