A pesar de que el 2012 fue un año con gran incertidumbre en la economía
mundial y ese panorama aún se mantiene para el próximo año, el Perú de alguna
forma le fue esquivo a las crisis internacionales y al cierre del 2012 podría
crecer 6,3% con un auge que se extendería al próximo año, esto gracias a la
fuerte demanda interna y a una dinámica inversión de los proyectos,
principalmente en el sector minero.
En octubre, la economía registró su nivel de expansión más alto de los
últimos tres meses, acumulando un crecimiento de 6,3% en lo que va del año, y
de 6,2% en los últimos 12 meses. Para noviembre, el Scotiabank proyecta que el
crecimiento será de 6,5%, similar al registrado en octubre, y sostuvo que la
desaceleración estimada de los sectores primarios sería compensada por un mayor
dinamismo de los sectores no primarios vinculados a la demanda interna.
Para el 2013, los buenos indicadores que muestra la economía peruana son un
gran aliciente para el país. Sin embargo, el panorama externo aún causa
preocupación.
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